
Es un film para ver en un rato libre. No es una comedia tradicional. Tampoco hay escenas de sexo con la muñeca ni mucho menos. Lars es un muchacho de un pueblo norteamericano con mucha soledad. Ambos (Lars y su muñeca), transitan el camino del conocimiento mutuo y hacia los demás a partir de la locura del personaje, que se descubre y reinventa...